Si has pensado en dejar el rastrillo de plástico y optar por una clásica navaja de afeitar, ¡aquí te decimos cómo usarla sin sufrir accidentes en el intento!
La navaja de afeitar está teniendo un comeback y no solamente para esas barbas clásicas, la mayoría de los hombres la utiliza para curar su aspecto y realizar un afeitado mucho más detallado.
Y es que la realidad es que las navajas de afeitar ayudan a preservar el medio ambiente y evitan tanto desecho y producción de plástico de los rastrillos comunes.
Además de ser eco-friendly, la otra gran ventaja de la navaja de afeitar es su gran ayuda para economizar; no sabes todo lo que te vas a ahorrar en rastrillos.
Así que no lo pienses más y no te dejes intimidar por la navaja de afeitar, disfruta de esta experiencia de lujo desde tu primera afeitada matutina. Te tomará 15 minutos lograr un rasurado perfecto.
Te compartimos los pasos a seguir para un excelente afeitado con navaja:
1. Prepara la piel de tu rostro tomando una ducha.
Esto permite que el calor húmedo abra los poros y suavice el vello facial. Si acostumbras rasurarte antes de bañarte, usa agua caliente o toallas húmedas para lograr el mismo efecto. Sé paciente.
Calentar y humedecer la cara correctamente es un paso importante por varias razones, pero principalmente porque proporciona un afeitado más rápido y satisfactorio. Un par de minutos con las toallas calientes preparan la piel, evitando el arrastre de la navaja, permitiendo que la barba se suavice debajo de la superficie de la dermis. No recomendamos lavar la cara con algún producto antes de rasurarte; en la mayoría de los casos, los jabones pueden eliminar los aceites protectores segregados naturalmente alrededor de los folículos pilosos y poros.
2. Aplica aceite pre afeitado; ¡eso lo cambia todo!
Estos aceites ayudan a proteger la piel y son una maravilla para realizar el proceso de manera óptima. Con los poros abiertos, es muy importante usar los productos más adecuados para el cuidado de tu piel y evitar irritaciones. La aplicación del aceite correcto para antes de rasurarte humecta el área de afeitado, ayuda a reducir la resistencia y puede actuar como un antiséptico.
Para todos ustedes que no usan estos productos en su rutina de afeitado, prepárense para un game-changer.
3. Lo básico: una crema de afeitar.
La crema para rasurar correcta tiene que tener una fórmula altamente alcalina, suavizante casi al contacto con el vello y debe continuar el proceso de apertura de los poros y, si se produce bien, debe humedecer aún más la cara y cuidar la textura de la piel. Asegúrate de que no tenga alcohol ya que éste sólo te irritará.
- Sé old-school y usa una brocha de afeitar.
Aplicando la espuma con una brocha de afeitar puedes mejorar la experiencia inmensamente. Además que te hará sentir fresco, la brocha levantará los folículos pilosos, producirá una espuma más espesa y exfoliará tu piel. No hay nada mejor que la sensación de una brocha llena de espuma enjabonando tu cara y cuello: esta es la manera en la que un hombre convierte una obligación diaria en un placer. Limpia cualquier residuo con una toalla caliente.
5. Suaviza la navaja de afeitar.
El famoso “stropping” es la habilidad más importante que debes aprender para mantener el borde de tu navaja recta. Recomendamos estrechar cada vez que te afeites ya sea antes o después del afeitado, es una preferencia personal. Tómate tu tiempo para aprender y ten cuidado. La forma más fácil de desafilar o “enrollar” el borde de la afeitadora es con movimientos bruscos y descuidados.
6. El acto mismo de rasurarse.
Estira tu piel con fuerza mientras aplicas la navaja de afeitar (lo recomendado es hacerlo en un ángulo de 30 grados desde el rostro), el secreto está en tensar de manera determinada la piel con la otra mano, ayúdate también tensando el cuello.
Ahora, rasura de arriba a bajo, al mismo sentido del crecimiento del vello. Tres pasadas ayudarán a asegurar la máxima suavidad.¡Usa la presión que consideres necesaria pero sin exagerar!
Al igual que con otros placeres de la vida, demasiada presión puede causar irritación… así que tómate tu tiempo y hazlo con calma.
Además, es una buena idea cambiar tus cuchillas con frecuencia. Si eres propenso a los pelos encarnados, una presión más ligera y seguir los pasos anteriores te ayudará significativamente.
7. No te olvides del after-shave.
Después de haberte rasurado enjuaga bien tu cara, el agua tibia se siente bien, pero a algunas personas les gusta el agua fría para cerrar los poros. Si prefieres usar algún producto para limpiar tu rostro, te recomendamos algo que contenga un nivel de pH de 5 a 5,5: éste es el nivel natural de la piel de la cara y no alterará el equilibrio de los aceites faciales naturales, que pueden causar sequedad en la piel o, por el otro lado, una cara brillosa.
También puedes aplicar un bálsamo natural para después del afeitado que se absorbe rápidamente, brindando protección instantánea y calmando el ardor de la piel. No uses productos a base de alcohol, son lo peor, ya que pueden irritar la piel en exceso por la secreción de aceites, lo que puede provocar el desarrollo de vellos encarnados.
- Lava la navaja siempre.
Al finalizar el proceso, no dejes de lado este paso higiénico. Lava la navaja para así eliminar la espuma y el vello que se haya podido quedar en ésta. Después, sécala con una toalla pequeña revisando que no se quede ningún residuo de tela.
9. Mantenimiento diario.
¡Todos los hombres deben hidratarse diariamente! Una crema hidratante (preferiblemente la más natural) repone y restaura lo que reduce el afeitado. ¿Por qué alguien se involucraría en un ritual que seca y envejece la piel sin aplicar un remedio? La crema hidratante es la solución ideal ya que refresca la piel y suaviza toda la irritación que pueda ser causada por rasurarte (aún cuando uses after-shave de Buena calidad). Usar cremas es un taboo en muchos hombres por tener una connotación femenina, pero ¿no creen que ya es tiempo que nos deshagamos de esos prejuicios y seamos los hombres seguros de nosotros mismos que siempre tuvimos que ser?
Con estos tips sobre cómo afeitarte con navaja ya no tienes excusa, ahora podrás gozar de este lujo, y ademas realizarlo como todo un profesional ¡Manos a la obra!